Una de las parejas más reconocidas de la televisión, pero que guardaba un secreto sobre su amor.
Roberto Gómez Bolaños y Florinda Meza iniciaron su romance en los sets de “El Chavo del 8”, donde ambos eran compañeros ‘Doña Florinda’ y el chavo, además de que Chespirito se empeñaba como actor, también era el escritor y director del programa. Ambos artistas comenzaron una relación que duro casi cuatro décadas, hasta que se dio la lamentable muerte del comediante mexicano.
Fue hasta 2004, 27 años después de empezar a vivir juntos, que se casaron y nunca tuvieron hijos, pero su relación siempre se mantuvo en la polémica no solo por la diferencia de edad, sino porque ambos tenían pareja cuando se comenzó a especular que estaban juntos. Y es que Florinda mantenía una relación con Carlos Villagrán, Quico, Roberto estaba casado con Graciela Fernández, con quien tenía siete hijos.
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Pero la pareja ocultaba más secretos que fueron revelados por la actriz luego de que su esposo falleciera, durante el programa ‘Suelta la sopa’ revelo detalles íntimos de su vida en pareja, sincerándose con la audiencia narro como hubo una época en la que se negaba a tener relaciones sexuales con ‘Chespirito’.
"Yo no quería porque era mi jefe y tenía siete valijas de pasado, muy pesadas, una esposa y seis hijos, pero aparte era mi jefe y yo decía ‘esto no se debe hacer porque de pronto te quedas sin el hombre y sin la chamba"
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Pero tiempo después se percató que si podrían tener un futuro juntos, así que cedió a los encantos de Gómez Bolaños y se entregó en cuerpo y alma, con el tiempo se dio cuenta de que se mantendrían unidos hasta sus últimos días.
En otra ocasión, Florinda Meza revelo como fue su primer beso a través del programa argentino Morfi, señalando que fue durante un viaje a Chile en 1976, cuando ambos se encontraban en un bar.
“‘Si tienes un matrimonio, tienes hijos y tu mujer es linda y buena, ¿por qué haces todo lo que haces?’, y él me contestó: ‘Siento que mi vida está vacía, me falta algo, a veces siento que me gustaría que alguien me besara…’”
“Y ahí se me salió: Si quieres besar a alguien, ¿por qué no me besas a mí?”
Así fue como Florinda recibió un apasionado beso, del cual después se arrepintió debido a que era su jefe, un hombre casado y con hijos.
"Él insistía, yo seguía negándome, pero quería que él siga insistiendo"
*CM